Efecto y defecto de las «low cost»

Um texto do jornalista J. Cuartas Oviedo, refere que "el pasado octubre, una portavoz oficial de Ryanair, la compañía irlandesa de bajo coste que intentó operar en Asturias y que finalmente lo hizo en Cantabria, hizo público un diagnóstico demoledor: «Cantabria florece con Ryanair, mientras que Asturias se marchita con Easyjet». Durante el primer año de operaciones de Ryanair en Cantabria, el aeropuerto de Parayas arrojó crecimientos relativos fastuosos. Un aeropuerto secundario -que son los que más habitualmente utilizan las líneas de bajo coste por sus menores tasas aeroportuarias-, y con movimientos muy reducidos en términos absolutos, arroja incrementos porcentuales espectaculares con mucha más facilidad apenas se diversifica la oferta de vuelos. Pero, tal como había pronosticado en agosto el diario «La Gaceta de los Negocios», las tasas de crecimiento santanderinas no eran sostenibles. Cuando Ryanair y sectores de opinión asturianos hablaron de un crecimiento fastuoso en Santander y una decrepitud asturiana, el aeropuerto de Asturias superaba por segunda vez consecutiva el millón de usuarios y arrojaba crecimientos del 8,1 por ciento frente a un raquítico 0,7 por ciento de Parayas con sus escasos 650.000 usuarios. El estancamiento cántabro se explica en buena medida por el raudo crecimiento de Vitoria, tal como había pronosticado el diario económico madrileño. Desde Vitoria Ryanair empezó a hacer la competencia a sus propias líneas desde Santander, al tiempo que percibe ingresos de ambos territorios -de acuerdo con las prácticas habituales de este tipo de aerolíneas- en concepto de apoyo promocional al turismo. Vitoria creció el año pasado el 89,5 por ciento. En todos los aeropuertos de pequeño tamaño, la llegada de las «low cost» (compañías de bajo coste) arroja crecimientos similares. Pero esos incrementos no son mantenibles a medio plazo. Porque la captación de usuarios potenciales tiene su propio techo y porque las mismas «low cost» acaban por competir con otras análogas pero también consigo mismas desde aeropuertos cercanos que pugnan por tráficos competidores".